Los neuromoduladores son unas proteínas naturales altamente purificadas que relajan temporalmente los músculos faciales, previniendo la formación de arrugas y suavizando las existentes.

No todas las arrugas son tratables con estas proteínas; estas sólo se aplican en las zonas donde hay arrugas dinámicas o de expresión, generalmente en el tercio superior del rostro (frente, alrededor de los ojos y entre las cejas) dando como resultado una piel distendida, tersa y luminosa.

Este tratamiento se realiza mediante pequeñas inyecciones de neuromoduladores en diferentes músculos del rostro para relajarlos y reducir las líneas de expresión y arrugas.

Estas proteínas no solo tienen un uso estético, sino que también se utilizan en diferentes tratamientos médicos como el estrabismo, el blefaroespasmo y la espasticidad muscular.

El efecto dura varios meses, y se recomienda realizar más inyecciones al paso del tiempo para mantener los resultados.